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martes, 9 de octubre de 2007

el arte como juego

Gadamer afirma que la creación artística es el despliegue vital es un instinto lúdico. En los seres humanos el juego entra en su mundo cuando se establecen prescripciones para llevarlo a cabo, es ahí donde se separa del mundo en general, porque existe dentro de si mismo. Es ahí donde entra la intencionalidad de la consciencia.

Se ha ido descubriendo que hay actividad de juego en las actividades cotidianas, porque entramos en distintos roles; se juega a que se es. El hombre decide libremente a participar en algo y llevarlo a cabo. Es entonces cuando el ser humano comienza a jugar a representar ciertos papeles y en uno de ellos entra la actividad creadora de arte. El autor dice que el arte comienza donde se puede hacer algo de modo diferente; o sea que hay objetos que pudieran ser utilizados en la cotidianidad, pero su finalidad no es esa, sino ser conformaciones de arte que fueron creadas para “ser” nada más. El arte se “refiere a algo”, y pudiera que no nada más esto se centre en su concepción, sino en la característica única y especial que tiene el objeto.
La obra de arte rehusa toda utilización"

Para seguir explicando el juego del arte Gadamer utiliza la palabra “conformación” para llamar a la obra. Porque se va dejando atrás el proceso de surgimiento para que frente al espectador quede “plantada sobre sí misma”.

Materia y obra. No todas la obras de arte están depositadas en algo tangible, para que surjan se necesita de ser reproducidas; al suceder esto, la conformación le participa al espectador. Se juega en un doble vinculo; la obra está llevada a cabo y por en el otro sentido (del doble vínculo) el espectador la retoma y aprehende para sí captando lo simbólico, apreciando lo bello y transformando esa experiencia artística en una fiesta, donde todos los participantes están reunidos para deleitar la experiencia que se tiene frente a la obra.

Kant describía lo bello como el estado de la mente en el que nuestras facultades intelectuales, el entendimiento y la imaginación, juegan un juego libre”.

Shiller “atribuyó el comportamiento estético a un impulso lúdico que despliega su propia y libre posibilidad en medio del impulso de la materia y el impulso de la forma”

“La auténtica base de la conformación es el mímesis”. Para explicar el mímesis es necesario ver su primer uso, que consistía en aquellas cosas que producían los griegos que no servía para cosas reales, sino que el objeto producido tenía las funciones de representar. Ahora lo mímico se traduce en la imitación consciente de una persona. Todo el cuerpo juega un papel importante a la hora de imitar. Lo mimético se hace conscientemente en el sentido de que el espectador es consciente de que ante el se esta representando algo. El actor juega un papel. La comunicación se da por esa vía en la cual no se quiere engañar al espectador, sino se le quiere comunicar algo. El juego está en el hecho de que existe cuando se esta llevando acabo, cuando es una apariencia, como lo que mencionaba sobre el juego, se “hace como si”; existe en su dimensión cuando quien juega pone reglas y prescripciones en su tiempo junto con su intencionalidad. Es en esta parte del juego donde se manifiesta la participación, en el sentido de comunicación. Lo visualizo en un teatro: un actor, el escenario y yo sentada en una butaca. El actor está en ese juego de la apariencia y me da su representación, yo observo, capto la información que me comunica y es entonces cuando ambos estamos participando en el juego.

La conformación del arte es la apariencia verdadera, dice Gadamer. Es común a todos, porque el autor se apartó de ella por medio del proceso creativo en donde se plasmó él y la obra lo comunica con los demás.

En la actividad mímica va implícito mostrar, como a Gadamer le gusta mucho decir lo que no es, para luego decir lo que es, afirmo que mostrar no es demostrar. Simple y llanamente se muestra lo que se quiere proyectar, se deja mirar correctamente al otro. Es entonces que se da el proceso de reconocimiento. Se dice que “cuando algo es arte, resulta inconfundible”, esto se da porque surge el reconocimiento de la obra como algo artístico.

Aristóteles decía que “la poesía hace mas visible lo universal que lo que puede hacerlo la historia”. Esto se debe a que la poesía permite la participación del espectador, mientras que la historia solo repite los sucesos del pasado, donde el espectador mira pero no se sumerge; en la historia no juega.

Para diferenciar lo artístico de lo no artístico, Gadamer hace una comparación, entre una fotografía periodística y un retrato artístico.
Cuando se observa una fotografía de alguien a quien no se conoce, la foto carece de sentido, porque es imposible contextualizar y por ende, entenderla. En cambio en un retrato artístico, aunque no se conozca el objeto o el personaje retratado se percibe la universalidad, porque todos podemos captar el retrato, debido a que sabemos que es una pintura o un dibujo y no la captura de un momento de la realidad, entonces no es necesario contextualizar, porque
la obra es un universo en sí misma.

En el texto se hace una crítica al co-jugador de la industria cultural actual, que esta reducido a un consumista de arte el cual se embelesa frente a la obra y se pierde de sí mismo, utiliza la conformación como una realidad alterna. Es cuando Gadamer dice que se malentiende y hay que separar el juego consciente donde se establecen reglas y la actividad lúdica libre.

El juego del arte es más bien un espejo, que a través de los milenios, vuelve a surgir siempre nuevo ante nosotros, y en el que nos avistamos a nosotros mismos, muchas veces de un modo bastante inesperado, muchas veces bastante extraño: cómo somos, cómo podríamos ser, lo que pasa con nosotros.

Yo juego con la obra de arte, creamos un vínculo en el cual yo la observo y me participa algo; su esencia sin importar ir mas allá de la pura experiencia del deleite, me conozco, me reflejo, la reproduzco en mi mente.

Juego vs. Seriedad ¿?

Cuando somos niños, lo más importante es jugar y esto a menudo en el correr del tiempo se nos va olvidado; dejamos de recordar la importancia que tiene la actividad lúdica en el alma y desechamos el juego libre para centrarnos en un mundo “serio”. Siendo el juego una fuente poderosa de donde emana la creatividad y de ahí el arte.

Nietzsche: “La madurez del hombre significa haber reencontrado la seriedad que tenía cuando niño en el juego.

El Símbolo en el Arte.

Lo bello del arte esta en aquello que no encontramos de manera inmediata en una obra, sino en algo que evoca. Entonces el símbolo es un “algo”, un pedacito de ser que anda vagando por ahí y que complementa lo que estamos observando.

“la experiencia de lo bello, y en particular, de lo bello en el arte, es la evocación de un orden íntegro posible, dondequiera que éste se encuentre”.

Gadamer cuestiona qué es propiamente la significatividad del arte. Goethe y Shiller dicen que lo simbólico no solamente remite al significado, sino que lo representa. La obra de arte hace las funciones de símbolo, porque representa algo más sólo que producida para otros fines y nos da acceso al objeto que sirvió de base para ser creada, sin dejar de lado que “la obra no solo remite a algo, sino que en ella está propiamente aquello a lo que se remite”.

Es importante, en la actualidad estar mas receptivos hacia lo que el arte nos quiere mostrar o dejar escuchar, según Gadamer. Elevarnos sobre las contingencias y hacer de ésta experiencia algo trascendental.
No se necesita encontrar el significado intelectualmente,
el símbolo lo lleva implícito.

1 comentario:

joe dijo...

compañera, me da mucho gusto que haya retomado concientemente su responsabilidad como estudiante de estética y del resto de cosas filosóficas, o sea que ya se haya dejado de haer wey y estudie, jajaja!!!

felicidades.

yo ya he renunciado a eso. la cosa conmigo es lenta... mi cerebro está bastante atrofiado. no quiero saber nada de eso, sabes??? pero luego, algún día, volveré.

bays!!!

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